La base es el ingrediente que aporta cualidades organolépticas(aroma, sabor o color), dando asi la primera orientacion al cóctel.Este se construira en torno a esta base única.Por lo general la base esta constituida por un aguardiente;Vodka, ginebra, whisky(o whiskey), ron, tequila, brandy o calvados.El champagne(Champan) tambien es una base del coctel, aunque su caracter espumoso permite considerarlo tambien un cuerpo.
La proporcion entre la base y el resto de los ingredientes va variando segun su trate de tragos cortos o tragos largos.
Para un
El sabor de esta base de aguardiente siempre es perceptible e identificable, por esto se puede identificar un trago corto según la base que lo compone, ejemplo:cocteles a base de vodka.
En los
El cuerpo es el ingrediente, o grupo de ingredientes, que actúan sobre la textura del cóctel, aportando aromas de carácter complementario que se combinan con los procedentes de la base. El cuerpo puede ser líquido o una sustancia más o menos densa.
Puede tratarse de un vino común o de un vino espumoso (como el champán), un vino aromatizado (como el vermut) o un vino fortificado (como el oporto). Estos productos vinosos, mezclados con el alcohol de base, permiten mantener una textura fluida y añadir una nota de dulzor cuando contienen azúcar. Los encontramos básicamente en los tragos cortos, aunque no es extraño emplear un champán como bebida gaseosa para preparar un trago largo.
El cuerpo también puede ser agua mineral, con o sin gas, o incluso una bebida gaseosa aromatizada, como la cola, la tónica, la soda de lima-limón, el ginger ale o el ginger beer. Éstas confieren una sensación de suavidad al paladar, que se aprecia sobre todo en el caso de un trago largo refrescante. No obstante, es preciso no anular el sabor de los otros componentes del cóctel.
Por último, el cuerpo puede ser graso, como la leche o la nata, o incluso la clara o la yema de huevo. Estas sustancias aportan cremosidad a la mezcla, pero hay que dosificarlas con precisión, sobre todo en los tragos cortos, ya que la sensación de dens9idad excesiva o de pesadez puede resultar desagradable.
Es el elemento complementario que conferirá al cóctel su sabor, amargo o dulce, y eventualmente su color.
Los bitters, como el Campari, y los bitters concentrados, como la angostura, aportan una dosis de amargor más o menos fuerte. Algunos también actúan como colorantes.
Los aditivos dulces, entre los que se encuentran los jarabes y los licores, atenúan el fuerte sabor del alcohol de base, aportándole un aroma nuevo. Su poder colorante también puede añadir un toque de fantasía, como lo hace la granadina al Tequila Sunrise.
En todos los casos, ya sea con un bitter, un jarabe o un licor, hay que procurar no desequilibrar el resultado final. En un trago corto, en el que el cuerpo representa un volumen reducido, el licor escogido como aditivo aromático influirá notablemente en la textura del cóctel. En última instancia, cuando el cóctel contiene una base pero no tiene cuerpo, el uso de un licor como aditivo le conferirá un carácter licoroso.
En el caso particular de que el cóctel no tenga base y se componga sólo de cuerpo y un aditivo (como sucede, por ejemplo, con el Kir y el Vermut Cassis), evidentemente hay que aumentar la porción de este último para obtener la fuerza alcohólica deseada.
Artículo extraído del libro: Cócteles, Autor: Fernando Castellón, Editorial Larousse.
Sabemos que mezclar algunos alcoholes base resulta siendo completamente desaconsejable. A lo largo del tiempo la práctica nos ha mostrado que la mezcla de una base, un cuerpo y un aditivo aromático dan un resultado excelente.